Además, ¡la mayoría de las ventanas cuentan con mosquiteras para que los bichitos no nos molesten! Otra cosa súper genial es que pudimos meter los dos coches sin techo, así pudimos disfrutar del buen clima y la brisa marítima. Los baños son enormes, ¡qué lujo! hay un aparcamiento gratuito disponible, por lo que no tuvimos que preocuparnos por eso. El apartamento estaba equipado con todo lo necesario para cocinar, incluyendo utensilios y electrodomésticos. Además, ¡había una TV de pantalla plana para disfrutar de pelis por la noche! El acceso a la playa fue super fácil y cómodo, solo tienes que caminar unos pocos pasos y ¡voilà! ¡No se permiten mascotas y las habitaciones son para no fumadores, lo cual fue perfecto para nosotros! En resumen, fue una experiencia increíble en la que pudimos disfrutar de la playa al máximo sin ninguna preocupación.

me gustó que la mayoría de las ventanas tenían mosquiteras. Además, pudimos llevar nuestros dos coches sin problemas de aparcamiento. Los baños eran enormes y muy cómodos.

Nos hospedamos en la Villa Inocencia, que está ubicada cerca de la playa. Nos encantó que la mayoría de las ventanas tuvieran mosquiteras, lo cual nos permitió disfrutar de la brisa sin preocuparnos por los mosquitos. Además, tuvimos la suerte de que nos permitieran estacionar los dos coches sin techo. Los baños eran enormes y muy cómodos. La ubicación del alojamiento también era perfecta, ya que estaba muy cerca de la playa y no tuvimos problemas para encontrar estacionamiento.

Todo fue como quería y necesitaba. ✌️

Lo mejor de este lugar es su ubicación, ya que está muy cerca de la playa. Además, cuenta con ventanas con mosquiteras, lo cual es muy conveniente para evitar las picaduras de insectos. Por otro lado, los baños son enormes, lo que permite tener espacio suficiente para movilizarse cómodamente.

La falta de privacidad es un aspecto negativo, ya que vivía un familiar del dueño justo debajo. Además, la supuesta piscina dejaba mucho que desear, ya que se trataba más de una bañera y estuvo rota durante varios días.

Nos encantó la ubicación estratégica de este hotel cerca de la playa. Además, pudimos aparcar nuestros dos coches sin problemas. Otro punto a destacar son los baños espaciosos y cómodos. Todo estuvo perfecto.

Todo estuvo perfecto.

Me encantó la cercanía a la playa y la facilidad para aparcar en el hotel. Además, la mayoría de las habitaciones estaban equipadas con mosquiteras para evitar las picaduras. Otro aspecto destacable fue el tamaño de los baños, ¡eran enormes! Sin duda, estas comodidades hicieron que disfrutara aún más de mi estancia en este alojamiento durante las navidades.

En cuanto a los aspectos negativos, debo mencionar que la falta de privacidad fue un problema, ya que vivía un familiar del dueño en la planta de abajo. Además, en el patio donde se encontraba la barbacoa y la ¿piscina?

La ubicación del hotel era perfecta, estábamos super cerca de la playa y pudimos disfrutar del sol y el mar todo el día. Además, había un montón de bares y discotecas cerca, así que pudimos salir de fiesta todas las noches. ¡Fue una pasada!

Si tuviera que mencionar algo que se pudo mejorar, creo que al hotel le faltaba un poco de ambiente juvenil. Estábamos buscando un lugar donde pudieramos conocer a otros jóvenes y socializar más, pero no había muchas actividades de este tipo.

La cercanía a la playa. Amplios baños.Ventanas con mosquitera.Facilidad para aparcar.

Nada, es perfecto.

Una de las cosas que más me gustó fue la decoración del hotel. Todo estaba muy bien decorado, con estilo señorial y antiguo, lo cual le daba un ambiente muy acogedor. me alegró ver que el hotel contaba con rampas y ascensores, lo cual facilitaba mucho el acceso para personas mayores como yo.

Lo único que pediría para unas mejores vacaciones para personas mayores sería que el personal del hotel estuviese más atento y pendiente de nuestras necesidades. A veces, sentía que les faltaba un poco de consideración y comprensión hacia nosotros, los huéspedes de mayor edad.

Me encantó la decoración del hotel, especialmente las áreas comunes. Los colores suaves y los muebles elegantes crearon un ambiente acogedor y tranquilo. Además, me gustó mucho que el hotel fuera accesible para personas mayores como yo. Había rampas y ascensores que facilitaban la movilidad, lo cual fue muy conveniente.

Lo único que pediría para unas mejores vacaciones para personas mayores es un poco más de personal en el hotel. Aunque los niños que trabajaban allí eran amables y serviciales, a veces parecían estar desbordados de trabajo.

La ubicación es perfecta, muy cerca de la playa. Las ventanas tienen mosquiteras y los baños son enormes. Se puede aparcar sin problemas y llevar dos coches sin techo.

Estuve muy bien, no tengo ninguna pega.